Tres maneras de llevarlo a la práctica con los niños:
Enseñando a comprometerse con la Gran Comisión: Orando, Dando y Yendo. Enseñar el significado de orar, dar e ir cuando son niños y niñas y adolescentes hará un gran eco de impacto en su alma y sus acciones cuando sean adultos.
Orar
Revelar a nuestros pequeños las grandes necesidades de nuestra sociedad alrededor del mundo y colocarse en la brecha de Oración por ella. Esto desarrolla un corazón esencial y les hace sentir parte de la transformación de las naciones para Cristo.
Recursos que se pueden utilizar: Mapa de ciudades y naciones, tarjetas de oración, guías de oración, fotografías de la niñez alrededor del mundo, caminatas de oración, y muchas ideas más.
Dar
Nuestros niños, niñas y adolescentes deben desarrollar un corazón dador para engrandecer la obra de Dios aún con lo poco que puedan.
Estimular a los pequeños corazones desde que son tiernos en edad a dar sin importar la cantidad sino el gozo y la bendición que se siente al dar para la obra. Cuando se desarrolla este hábito en ellos al llegar a adultos ellos continuarán separando una porción de sus entradas para las misiones.
Recursos que puede usar: adoptar programas misioneros que traen proyectos para dar a la obra misionera. Preparar una alcancía y rotularla que diga “Misiones”. Donación de juguetes, útiles escolares, ropa, son algunas cosas en las cuales los niños pueden involucrarse en dar.
Ir
A menudo pensamos que el ir o enviar misioneros es solo para los países desarrollados, pero no es así el mandato es para todos.
Cuando se comenzó a darle pies a este mandato en nuestra iglesia en Bolivia, muchos creían que no se debería hacer porque no había muchos fondos y pertenecemos al antepenúltimo país más pobre de América según las Naciones Unidas. Pero se incentivó a creer que cuando Dios llama Él sustenta, y de esta manera nuestra iglesia empezó a llevar equipos de niños, adolescentes y jóvenes dentro de Bolivia, Paraguay, Ecuador, Argentina, Uruguay, Kenia, Uganda a tener experiencias misioneras.
Muchos de los que participaron en estos viajes misioneros están sirviendo fielmente en diferentes ministerios en varios lugares y esferas de la sociedad.
Recursos: Busque misioneros que están dentro de su país o fuera y lleve equipos a corto plazo de diferentes edades para servir en el área que necesiten. Visiten hogares de cuido de ancianos, orfanatorios, hospitales. Eso también es ir y hacer misiones.
La Gran Comisión involucra a todos y la niñez debe estar activamente trabajando en ella desde su corta edad en toda la línea de tiempo de su vida. Por donde este o donde Dios lo coloque debe ser un libro abierto del poder de Jesucristo y su transformación “Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra” (Hechos 1:8 NVI).
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