La tecnología, una herramienta poderosa en el ministerio a la niñez

Soy maestra de escuela bíblica desde hace años. Soy de esas que comenzó enseñando y escribiendo en un pizarrón; de las que mostraba unas laminitas de fieltro en un trípode como recurso visual y repartía papeles con laberintos y piezas para recortar o pegar, para reforzar la enseñanza.

¡Como ha evolucionado la manera de discipular a nuestros niños! Ahora tenemos materiales y equipos fabulosos para usar e instruir la Palabra de Dios. Uno de ellos es la herramienta de la tecnología, la cual está alrededor nuestro. Es imprescindible. La pandemia nos hizo ver lo útil y necesaria que es en el discipulado a la niñez.

Hemos despertado a un mundo híbrido que no conocíamos. Creíamos que la tecnología tenía que ver con los enseres eléctricos y algunas otras cosas a las que estábamos ya familiarizados, pero no teníamos que sumergirnos en ello de manera profunda. De pronto, nuestro mundo se volvió virtual y digital para poder comunicarnos y poder vivir. Entramos en una esfera que nuestra generación no estaba acostumbrada. En un abrir y cerrar de ojos apareció Zoom, WhatsApp, Facebook Live, unos cambios tan rápidos en la sociedad que con tan solo apretar una aplicación aprendimos a hacer compras sin salir de casa, transferimos dinero de un banco a otro. Una cajita pequeña llamada “Alexa” o “Siri” comenzó a dar contestaciones a cualquier pregunta que no sabíamos. Google se volvió nuestro amigo. ¡Sorprendente!

Estos cambios tan vertiginosos se nos han hecho difícil adaptarnos a los más entraditos en edad, pero a los niños y jóvenes no. Ellos nacieron dentro de la tecnología. Son nativos digitales; no conocen otra cosa fuera de la tecnología. Mientras nosotros nos seguimos adaptando, ellos han hecho la transición mucho mejor que nosotros.

La pandemia nos ha hecho ver a nosotros como educadores de la Palabra de Dios unas realidades. Si queremos discipular a las generaciones actuales en el temor de Señor y enamorarlos del evangelio, tenemos que usar los recursos, las herramientas y el lenguaje de los niños y jóvenes virtuales. Si no lo hacemos, nos volveremos irrelevantes, puesto que no entenderán, por lo tanto, se irán de nuestras congregaciones, porque no los estaremos alcanzando con el mensaje más maravilloso del Evangelio, el cual deben oír lo antes posible y que hará una transformación en sus vidas para que vivan victoriosos en un mundo en crisis y el cual se les hará difícil enfrentar sin Jesús.

Hay que reevaluar el proceso educativo y ver qué avances tecnológicos estamos incorporando que hablen el idioma de estas nuevas generaciones. Los padres milenarios y sus hijos de las generaciones Z y Alpha son todos nacidos bajo la influencia digital y virtual; por lo tanto, todo lo que sea tecnológico para ellos es fácil de comprender y entender. Lo que usted introduzca como novedoso, para ellos será algo grato y conocido.

No tenga miedo, ore, pídale al Espíritu Santo que le guíe a incorporar la tecnología en su plan de clase. Ya sea virtual, presencial o ambos. No importa si los tiene en el salón de clase o en modo virtual; tendrá que usar la tecnología para provocar a los discípulos a ser atraídos a escuchar lo que Dios tiene para ellos en ese día.

¿No sabe por dónde comenzar? Busque ayuda. Pregunte. Siempre hay alguien en el equipo que sabe cómo hacer lo que usted necesita. Incorpore los elementos tecnológicos, digitales o virtuales que ya comenzó a usar durante el encierro y que Dios le inspiró a preparar para dar una lección por Zoom, o por Facebook, cosa que nunca en su vida había hecho.

Modifique, adapte, cambie y combine los métodos y las estrategias tradicionales añadiendo elementos técnicos que sorprendan y motiven a los discípulos a involucrarse en la enseñanza y aprendizaje. La creatividad comenzará a fluir y surgirán historias bíblicas poderosas que llegarán al corazón de cada niño.

Recuerde que podemos cambiar las herramientas, los métodos, los recursos, pero el mensaje siempre es el mismo. Si estamos respaldados por la oración, sabemos que el Espíritu Santo se encargará de depositar la Palabra de Dios en cada tierno corazón.

Puntos importantes al usar la tecnología en las redes sociales
La seguridad y la integridad son partes vitales de un ministerio infantil saludable y eso también se aplica a cualquier estrategia de ministerio digital.

  • Aborde la seguridad y la integridad en el discipulado digital.
  • Haga un plan para comunicaciones efectivas en las redes sociales con su equipo.
  • Actualice sus políticas y procedimientos de acuerdo con el uso de la tecnología.
  • Tenga permiso para publicar fotos de los niños, juveniles y voluntarios.
  • No comparta información personal sobre sus hijos / familias en sus publicaciones.
  • Utilice únicamente contenido para el que tenga permiso de uso.
  • En caso de duda, no publique.

Uso de las redes sociales

  • Crear un chat informativo de padres.
  • Abrir una página del ministerio en internet, Facebook o Instagram.
  • Facebook live. • Crear registro de datos.
  • Enviar correos electrónicos.
  • Use YouTube para enviar canciones para aprender.
  • Reuniones virtuales con su equipo o con los padres.

Ideas para los nativos digitales

  • Use los teléfonos inteligentes de los niños y jóvenes para que busquen citas bíblicas en distintas versiones.
  • Tik tok puede ser usado para crear anuncio de un evento
  • “Selfie”concurso de selfie leyendo la Biblia o con los padres.
  • Crear un chat de peticiones de oración.
  • Puede enviar lección electrónica por mensajería.

Puede crear una historia usando estas aplicaciones o sitios webs para crear su lección:

  • Stock potos.
  • Video.
  • Magisto.
  • Vimeo.
  • Animoto.
  • Canva
  • Biteable.
  • Adobe spark.
  • PowerPoint.
  • unsplash.com
  • pexels.com.
  • pixabay.com

Puedes acceder a toda esta revista en forma gratuita aquí: Edición 34

 

 

 


Publicación más antigua Publicación más reciente